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[TCR]| Julio 2015

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Descripción del Producto

El Tipo de Cambio Real Multilateral (TCRM) volvió a apreciarse durante julio de 2015, sumando el decimoséptimo mes consecutivo en tendencia negativa y alcanzando el nivel más bajo desde diciembre de 2001. El proceso de apreciación volvió a acelerar, de la mano del generalizado debilitamiento de las monedas regionales respecto del dólar.

Durante el pasado mes de julio la alta tasa de inflación local y, consecuentemente, el alto diferencial de inflación respecto de nuestros socios comerciales, continuó siendo determinante. Pues, la misma amplificó el efecto negativo que tuvo sobre el TCR la apreciación nominal del peso respecto de las monedas regionales y el euro, y más que compensó la devaluación nominal registrada respecto del dólar y el yuan. En consecuencia, el TCRM profundizó su proceso de apreciación real. La mencionada tendencia se profundizó significativamente durante la primera semana de agosto de 2015, como consecuencia del fortalecimiento internacional del dólar.

Cuantificando. El TCN Multilateral (TCNM) promedió un valor de 8,97 durante el pasado mes de julio y de 8,897 durante la primera se agosto (fijando diciembre de 2001 como la unidad) En el caso de julio, el promedio mensual cayó 0,4% respecto del mes anterior y 1,3% respecto del mismo mes de 2014. En tanto, el promedio registrado durante la primera semana de agosto se ubicó 0,8% por debajo del registrado durante todo julio. En tanto, el diferencial de inflación multilateral alcanzó registros de 24,7% anual y 1,8% mensual durante el mes de julio. En consecuencia, el TCRM promedió un valor de 1,57 durante julio pasado (fijando diciembre de 2001 como la unidad), retrocediendo -2,2% respecto del mes anterior y -20,9% respecto del mismo mes de 2014.

Si proyectamos los correspondientes índices de inflación para el mes de agosto, tomando como base el desempeño durante los siete meses previos, y utilizamos el promedio de los correspondientes TCN bilaterales registrado durante la primera semana de ese mes, podemos proyectar un valor de TCRM para agosto de 2015 de 1,13. El mismo resulta 2,4% inferior al valor promedio de julio de 2015, ubicándose casi 40% por debajo del promedio 2002-2015 y convirtiéndose en el nuevo mínimo para la serie post crisis de 2001. 

En el caso del TCR vs dólar, el proceso de apreciación real también se sostuvo, aun a pesar de la devaluación nominal registrada a nivel bilateral. La cotización oficial del dólar en la plaza local promedió un valor en torno a $ 9,14 por unidad durante julio de 2015, registrando un alza de 1% respecto al mes anterior y de 11,8% respecto del mismo mes de 2014. En tanto, el promedio de la primera semana de agosto se ubicó en 9,2128, 0,8% por encima del promedio de todo el mes de julio de 2015. En tanto, durante julio de 2015 la tasa de inflación local alcanzó un valor de 2,1% mensual, 15% acumulado y 29% anual, determinado un diferencial de inflación respecto del dólar de 1,9% mensual y 29% anual.

De lo dicho se desprende un valor promedio para el TCR bilateral de julio de 0,997 (fijando diciembre de 2001 como la unidad) El cual resultó 0,9% inferior al registrado durante el mes previo, ubicándose 13,2% por debajo del correspondiente al mismo mes de 2014. Se trató del décimo octavo mes consecutivo con apreciación real respecto del dólar (desde febrero 2014)

En tanto, si nuevamente proyectamos los correspondientes índices de inflación de agosto de 2015 en función del desempeño registrado durante los siete meses previos y tomamos como indicativo para todo el mes el promedio registrado durante la primera semana, podemos proyectar una paridad real de sólo 0,987 (fijando diciembre de 2001 como unidad) para el mes en cuestión, la cual resulta 1,1% inferior al guarimos de julio 2015. Obsérvese que la paridad real en cuestión ya perforó el límite de diciembre de 2001, ya sea se considere la estimación de julio o la proyección de agosto. Es más, los valores ya están en línea con los registrados hacia fines del año 2000, muy próximos al promedio registrado entre 1998 y 2001 (fuerte atraso cambiario) y casi 39% por debajo del promedio 2002-2015.Con lo cual, es innegable que el TCR bilateral se encuentra franca y significativamente atrasado, afectando no sólo el dinamismo de las economías regionales con perfil exportador (vid, frutas de pepita, de carozo, cítricos, algodón, miel, leche, etc.), sino también de los grandes complejos exportadores a nivel local (oleaginoso, cerealero, minero, etc.)

En el caso del TCR vs Brasil y en lo referente al pasado mes de julio, nuevamente la alta inflación local apalancó el efecto de la apreciación nominal del peso respecto de la moneda del país vecino. En particular, la cotización del real en la plaza local promedió un valor de $ 2,8217 por unidad, registrando una baja de 3% respecto del promedio del mes anterior. En tanto, el promedio de la primera semana de agosto se ubicó 6,4% por debajo del de todo julio. En tanto, el diferencial de inflación bilateral de julio se ubicó en 1,5% mensual y 17,7% anual. Por lo tanto, durante el pasado mes de julio, el TCR entre el peso y el real promedió un valor de 0,8205 (tomando promedio del año 1998 como unidad), cayendo 4,4% respecto del mes previo y acumulando un retroceso de casi 35% en los últimos doce meses.

Si nuevamente proyectamos el diferencial de inflación bilateral de agosto en base a los registros de los siete meses previos y tomamos como indicativo el TCN bilateral promediado durante la primera semana, podemos proyectar un TCR bilateral para el octavo mes de 2015 de sólo 0,7597, un 7,4% inferior al de julio. En consecuencia, el nivel alcanzado por el TCR en cuestión durante el pasado mes de julio quedó muy cerca del nivel promediado entre la crisis brasilera de 1999 y la crisis argentina de 2001. Peor aún, la proyección de agosto (en base a TCN primera semana) ya es prácticamente igual a ese nivel crítico. Con todo lo que ello implica para el dinamismo de la exportaciones argentinas a ese país y una relación comercial ya de por sí muy deteriorada, como resultado de las medidas de corte  administrativo implementadas por la administración CFK para lidiar con el creciente desequilibrio de la balanza de pagos local.

Llegados a este punto, creemos imprescindible volver a resaltar que “no hay que poner la carreta delante del caballo”. Es decir, dada la negativa de la Administración CFK a realizar los ajustes necesarios cuando era oportuno hacerlo, el BCRA no tiene margen de maniobra para permitir que buena parte de los efectos negativos  asociados al proceso de fortalecimiento internacional del dólar, por un lado, y el propio proceso inflacionario local, por el otro, sean amortiguados vía un ajuste del TCN oficial. Pues, dado el agotamiento del esquema de política económica local, cualquier intento de devaluación nominal significativa corre el riesgo de, al igual que en 2014, retroalimentar el proceso inflacionario y profundizar la recesión.