Descripción del Producto
En el primer mes del año, los valores y cantidades exportadas fueron muy apalancadas por lo que hemos dado por denominar “efecto salida” del esquema de restricciones y controles de cambios. Es decir, la concreción de operaciones de exportación de productos agroindustriales, principalmente derivados industriales de la soja, que habían sido retrasadas a fines de 2015 a la espera de la modificación de las alícuotas de los Derechos de Exportación y la corrección cambiaria asociada a la salida del CEPO. Justamente, las cantidades exportadas de productos agroindustriales mostraron tasas de crecimiento interanual sólo comprables a las registradas en plena cosecha gruesa y en años de registros récord.
En cambio, la puesta en marcha y a punto del nuevo esquema de licencias automáticas y no automáticas probablemente haya jugado en contra en el caso del dinamismo de los valores y cantidades importadas, ya que también hubo compras al exterior reprimidas durante todo 2015.
Otro dato a resaltar fue el mal desempeño de las cantidades exportadas de manufacturas de origen industrial y de las cantidades importadas de bienes intermedios, ya que ambos están en línea con la fuerte contracción experimentada por los niveles de producción de los principales bloques industriales en el arranque de 2016, reforzando la presunción de continuidad de la recesión fabril.
Vamos a los datos. Los valores exportados redondearon los US$ 3.886 millones, incrementándose en un 2% respecto igual mes de 2015. En este caso, la fuerte alza de las cantidades (+23% anual) más que compensó la caída de los precios promedio (-17% anual)
En cuanto a los rubros, dado lo señalada más arriba, fueron los Productos Primarios (PP, +13% anual valor, -19% anual precio y +39% anual cantidad) y las Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA, +18%, -22% y +51% anual, respectivamente) los que explicaron el alza de los valores y cantidades. En ambos casos como resultado del fuerte dinamismo de las exportaciones de los productos agroindustriales. Cereales (+12% anual en valor), Oleaginosas (+10% anual), aceites y grasas (+62% anual) y residuos de la industria alimenticia (+32% anual)
En cambio, las exportaciones de Manufacturas de Origen Industrial (MOI) siguieron siendo afectadas negativamente por el mal desempeño de su principal mercado destino, Brasil. En consecuencia, cayeron -19% en valor, -9% en precio y -11% en volumen. Por lejos, los peores desempeños fueron para los metales comunes y sus manufacturas, el material de transporte terrestre, los productos textiles y el papel, cartón, impresos y publicaciones.
También cayeron fuerte los valores exportados de combustibles y energía (-33% anual), muy afectados por la caída de los precios externos (-16%) y de las cantidades (-21%)
Por el lado de los mercados destino, la responsabilidad del alza de 2% anual de los valores exportados, recayó casi en su totalidad en la Unión Europea y China. Ya que el valor de los envíos a dichos destinos creció 25% y 9% anual, respectivamente, frente a caídas de 31% en el caso del MERCOSUR, -19% para Chile, -24% para Resto ALADI y -6% para Nafta.
En tanto, los valores importados redondearon los US$ 4.046 millones, cayendo 4% respecto de enero de 2015, dada que la caída de los precios (-10% anual) más que compensó el alza de las cantidades (+6% anual)
Hacia el interior. Los bienes de capital mostraron un alza de 6% en los valores, producto de una caída de los precios promedio de -2% y un alza de 8% en las cantidades. Algo engañosas pueden resultar las caídas de los valores importados de partes y piezas de bienes de capital y de bienes de consumo (-8% y -3% anual, respectivamente), pues las mismas fueron en su totalidad resultado de los menores precios. Dado que las cantidades mostraron alzas significativas (+10% y +4% anual, respectivamente) En cambio, en el caso de los bienes intermedios (-18%) la fuerte baja de los valores importados fue fiel reflejo de las menores cantidades (-8%), cuyo impacto negativo fue apalancado por los menores precios.
De lo dicho se desprende un saldo comercial negativo en US$ 160 millones, que equivalió a menos de la mitad del rojo registrado durante el mismo mes de 2015 (US$ 408 millones) Todo esto como resultado de que los fuertes déficits registrados con China (-US$ 808 millones), el MERCOSUR (-US$ 205 millones), la UE (-US$ 28 millones) y el NAFTA (-US$ 328 millones), más que compensaron los superávits logrados con Chile (+US$ 125 millones), el Resto ALADI (+US$ 91 millones), el Sudeste Asiático (+US$ 236 millones), Norte de África y medio oriente (+US$ 469 millones) e India (+US$ 168 millones)
En el caso de nuestro principal socio comercial, Brasil, los valores exportados alcanzaron apenas los US$ 512 millones, contrayéndose 29% respecto de igual mes de 2015. En tanto, los valores importados desde ese país vecino redondearon US$ 851 millones, cayendo sólo 2%. Dado el mayor ritmo de contracción de las exportaciones (15 veces mayor al de las importaciones), se deterioró significativamente el saldo comercial bilateral. El mismo pasó de un rojo de casi US$ 150 millones en enero 2015, a uno de casi US$ 340 millones doce meses después (más del doble) Obsérvese que ese rojo bilateral más que duplicó el déficit comercial multilateral.
Perspectivas. El mal desempeño esperado para Brasil, el menor volumen de cosecha de soja, buena parte de las economías regionales del interior que aún “no han logrado hacer pie” y la contracción de los precios internacionales de nuestros principales productos de exportación indican que la caída de los valores exportados será una constante en 2016, más allá de lo señalado para enero. En tanto, es de esperar un desempeño también negativo, pero de menor magnitud para los valores importados. Razón por la cual, esperamos que el déficit comercial se incremente durante el presente año. Recordemos que el año pasado cerró con un rojo de US$ 3.035 millones.
