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[335]| Del 9 al 13/11 de 2015

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Argentina – Hasta la última moneda. La Administración CFK se juega el todo por el todo profundizando restricciones cuantitativas con tal de no ceder a las presiones cambiarias
Profundizando. La semana pasada arrancó con el dólar blue hundiéndose bien por debajo de los $ 15 por unidad, para luego repuntar fuerte hasta los $ 15,50 por unidad. A partir de ese momento perdió fuerza, aunque no volatilidad, cerrando la semana en torno $ 15,30 por unidad. En tanto, este lunes (hoy) quedó en $ 15,1 por unidad.

Ergo, en el tramo final de la campaña electoral el mercado paralelo se desinfló (perdió volumen) y, consecuentemente, ganó en volatilidad, dada la expectativa de unificación cambiaría lanzada por el candidato presidencial que el mercado descuenta que ya ganó (Mauricio Macri – Cambiemos)

Aunque, esa expectativa aún no tiene mucho contenido (no hay datos concretos sobre cómo, con qué plazos y en qué contexto), razón justamente por la cual pareciera que muchos han decidido esperar, en cuanto a los compras y ventas de dólar blue, hasta ver qué es lo que ocurre o, mejor dicho, que se anuncia el 23 o 24 de noviembre con el resultado electoral ya puesto. Si es que se anuncia algo.

El incremento de la volatilidad se concreta en la mayor amplitud que muestra rango de fluctuación del blue: Un claro piso en $ 14,7 y un techo en $ 16 por unidad. Es decir, un rango de $ 1,3 o 10%.

Dado que el oficial cerró en $ 9,59 la jornada del lunes, la brecha cambiaria quedó en torno a 57%.

El efecto que tuvo la expectativa de unificación cambiaria post 10 de diciembre sobre el Blue no se trasladó al Contado Con Liquidación (CCL), que se sostiene demandado. En particular, el mismo sostuvo una marcada tendencia positiva y cerró el lunes en torno a $ 14,65 por unidad, marcándole un claro piso al Blue. El dólar Bolsa también se ubicó por encima de $ 14. Recordemos que el CCL había sido afectado por ventas obligadas de bonos forzadas por la Administración CFK para mantener a raya al Blue.

De lo dicho se desprende que las presiones cambiarias se sostuvieron en niveles elevados en un contexto de fuertes intervenciones del BCRA, quien realizó ventas netas en el mercado spot a razón de US$ 150 millones diarios. Todo lo cual, deja en evidencia el sostenido desequilibrio que sigue afectando a la balanza de pagos local aún a pesar del endurecimiento del esquema de control de capitales (CEPO) aplicado en los últimos cuatro años y el creciente stock de deuda flotante con importadores generado en los últimos meses.

De esta manera, el BCRA acumuló ventas netas en el mercado de cambios por más de 1.000 millones de dólares en la primera mitad de noviembre, dada la menor oferta y la sostenida demanda. Eso se suma a los US$ 1.590 millones de octubre y a los US$ 1.730 millones de septiembre.

Ahora bien. Lo señalado en los párrafos previos se combinó con significativas necesidades de divisas del Tesoro Nacional para hacer frente a los servicios de la deuda externa, determinando una fuerte caída de las reservas netas. En particular, nuestros cálculos ubican a las últimas por debajo de los de los US$ 500 millones, acumulando un retroceso de US$ 15.600 millones en lo que va de 2015 y de US$ 8.750 millones en el último mes y medio. Razón por lo cual, es de prever que lleguen al ballotage en terreno nulo o, incluso, negativo. Por todo lo dicho y tal cual habíamos anticipado oportunamente, damos por descontado que la nueva administración entrante el próximo 10 de diciembre iniciara su mandato con un BCRA con reservas “100% prestadas”.
A lo dicho hay que sumar el stock de deuda flotante que el BCRA generó con los importadores a lo largo de 2015, por DJAIs autorizadas por la Secretaria de Comercio (MECON) pero sin la correspondiente autorización del BCRA para la adquisición de las divisas. En particular, las estimaciones privadas ubican ese stock en más de US$ 9.000 millones.

Esa presunción de un BCRA cada vez más exhausto fue reforzada por el endurecimiento de las restricciones. En particular, el BCRA decidió reducir el límite diario de divisas que los bancos pueden vender a sus clientes sin previa autorización del BCRA para pago de importaciones de bienes y servicios, llevándolo de los previos US$ 75.000 a sólo US$ 50.000. Muchos importadores ya salieron a advertir que dicho monto no cubre en muchos casos el valor de un conteiner de mercadería. En 2012 el citado monto máximo era de US$ 500.000 diarios. Es decir, se redujo en un 90%.

En tanto, en el segmento de futuros del ROFEX se operaron US$ 245 millones y nuevamente salió el BCRA a vender fuerte en todos en los plazos, bajando un poco los precios, pero quedando por encima de las posiciones previas para los meses de febrero a mayo de 2016. El mes más operado volvió a ser marzo (un 25% del total), que cerró a $ 10,83 (32,95% TNA)