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[RECAUDACIÓN]| Agosto 2016

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Descripción del Producto

La recaudación nacional de tributos y aportes y contribuciones a la seguridad social alcanzó los $ 165.763 millones durante agosto del presente año, dejando el acumulado de los primeros ocho meses de 2016 en $ 1.276.825 millones. En consecuencia, registró un alza interanual de 25,1% nominal en agosto y acumuló una de 27,7% durante los primeros ocho meses de 2016.

Con una estimación preliminar de tasa de inflación mensual al consumidor de 0,8% para agosto; la tasa de inflación interanual del octavo mes de 2016 quedó en torno a 45,6% y la promedio para el primer cuatrimestre en 40,6%. En consecuencia, deflactada por IPC la recaudación tributaria nacional sumó su séptima caída interanual consecutiva, al retroceder 14% respecto de julio de 2015. En tanto que el acumulado de los primeros ocho meses resultó 9% inferior al de igual período de 2015.

El mal desempeño de la recaudación tributaria en términos reales es resultado de modificaciones que contribuyeron a reducir la presión impositiva, elemento especialmente visible en el caso del Impuesto a las Ganancias y los Derechos de Exportación (DEX) Pero también al mal desempeño del nivel de actividad local y sus principales componentes, evidenciado por ejemplo en el sostenido mal desempeño de la recaudación deflactada en concepto de IVA impositivo.

Si se analizan el aporte de los distintos tributos, en lo que se refiere a los datos acumulados para lo que va del presente año, vale la pena resaltar el impulso de los valores importados vía IVA DGA y Aranceles. Los cuales registraron tasas de variación interanual de 54,2% y 64,1% nominal anual durante ese período. Todo esto, aun a pesar del deterioro que vienen experimentando en términos interanuales los precios de importación (en dólares) Muy apalancados por la tasa de devaluación interanual entre el peso y el dólar norteamericano y la evolución de las cantidades importadas.

En tanto, resaltó el mal desempeño de la recaudación en concepto del impuesto a las ganancias, IVA DGI, aportes y contribuciones a la seguridad social y Derechos de Exportación (DEX)

El primero acusó el golpe de las devoluciones de retenciones y percepciones y la modificación del mínimo no imponible, anotando un alza interanual de sólo 7,3% nominal durante el pasado mes de agosto (-26,3% deflactada), que dejó el acumulado de los primeros ocho meses de 2016 14,5% nominal por encima de igual período de 2015 (-18,5% deflactada)

En el caso del IVA DGI, el relativamente bajo dinamismo interanual nominal (+22,3% anual en agosto y +28,1% anual en primeros ocho meses) y el mal desempeño real (-16% y -8,8% anual, respectivamente) está en línea con el igualmente “mal andar” que la mayor parte de los indicadores adelantados sugieren para el consumo durante el mismo período. Tanto por reducción de las cantidades, como por sustitución de calidades, las multiplicación de promociones y la migración desde primeras a segundas marcas.

En el caso, de los aportes y contribuciones a la seguridad social, las variaciones nominales interanuales fueron de 34,8% en agosto y 33,1% durante los primeros ocho meses, dejando las tasas deflactadas por IPC en -7,4% y -5,3%, respectivamente. Ese desempeño negativo está en línea con el deterioro de la masa salarial real que suponen niveles de empleo estancados o en leve retroceso, por un lado, y salarios nominales promedio que quedaron rezagados respecto del nivel general de precios al consumidor, por el otro. Pues, la aceleración inflacionaria se dio en la previa al inicio de las paritarias. Elemento indispensable para entender el mal desempeño del consumo privado que sugiere la recaudación de IVA DGI. En el mismo sentido jugaron la incorporación de conceptos no remunerativos en los primeros tramos de esos acuerdos salariales.

La recaudación en concepto de Derechos de Exportación (DEX) también cayó fuerte en agosto en términos interanuales (-32,4% nominal) Y más aún, si se toma en cuenta la tasa de devaluación interanual comparable (+63%) Todo esto, como resultado de las reducciones aplicadas en las alícuotas del principal producto de exportación gravado (soja y derivados), la eliminación de las mismas en el resto de los productos agroindustriales, el mal desempeño de los precios de exportación y la menor cosecha de soja. En consecuencia, el acumulado de los primeros ocho meses arrojó una caída nominal de 8,2%.